Trabajamos de forma tradicional y artesanal el pan de oro fino de alta calidad en Quilates, usando la misma técnica milenaria que en época Egipcia, con materiales orgánicos sobre soportes de madera ya tallada, forja etc.
Utilizamos el estuco o aparejo de manera tradicional para la preparación de cualquier tipo de dorado y estofado, con cola animal y sulfato cálcico para aplicar las procedentes manos de yeso, necesario para tapar el poro de materiales muy absorbentes como la madera y así conseguimos crear una especie de cama para su posterior dorado.
Todo el estuco se lija de manera artesanal con lijas y otras herramientas como raspines o rascadores respetando al 100% la obra en las formas de las tallas y huecos.

Una vez bien lijado procedemos a la aplicación de varias manos de bol, que es un compuesto de arcillas finísimas de origen Italiano o Alemán y cola orgánica en este caso de pez. Las manos de bol se aplican con un pincel de cerda suave y esto sería la base que servirá para bruñir o pulir el oro y así sacar el máximo brillo y esplendor.
Ya seco el bol pasamos perrillo y ya está lista la pieza para dorar humedeciendo con un pincel de cerda natural y cortando los panes con cuchillo sobre un pomazon( almohadilla recubierta de piel de gamuza llevando en su parte superior un enmarcado de pergamino) y depositándolo con polonesa.

Se espera secar y pasamos a bruñir con piedra de Ágata. Sacando brillos y mates para dar volumen a la obra.
Con esta técnica procedemos a Estofar con pigmentos naturales y huevo (temple al huevo) y con esto obtenemos un resultado de máxima calidad que perdurara con el paso del tiempo y el envejecimiento natural de la pieza, adquiriendo así un valor extraordinario.